Gelatina de frutilla

Detenida .
Estacionamiento.Toldos turbios.
De mi dedo sangre a borbotones.
Metales pesados contra mi carne,
destruyendo lo poco que quedaba.

La oportunidad perfecta para llorar.

Anhelada , la excusa fosforescente
se abrìa sobre mì.
Rodeada de bolsas y de cajas
nadie que me abrace.
El azùcar frenaba la sangre
porque no tu boca

¿Por qué el àzucar?

Algo blanco , blando.
Puntitos blancos sobre lo rojo.
Puntitos dulces , pero sòlo eso.Sin sabor.
Insaboros .Despojados de palabras o de pulsaciones .O de formas de decir,lo que màs quiero escuchar.
Lo que màs quiero.

El azùcar frenaba la sangre

las làgrimas no.
Ellas seguìan cayendo para acompañarme.
Resbalando
por no tener un tuper,
un plàstico donde
esconder mi angustia.
Guardarla al frìo , para que dure.
Cerca de la gelatina de frutilla ,
lejos de la puerta ,
por donde pueda escaparse de una buena vez.
Irse.

Cuando vuelva ¿estarè?

Carta ante un mediador sano.
Una incógnita terrestre que nos reacomode.
Parafinados destructores de abanicos :
desplieguen sus alas.
Cumplo ( desactivada ) en riguroso órden la promesa
y repercuten en mí , las notas áridas de los despreocupados.
Compongo y descompongo sólidos
que se desmoronan en un segundo ;
y cuento las escamas que me cubren ( cada vez más )
impermeabilizando mi cerebro.
Mantener el hábitat de los inconscientes nos demora
y nos llena de pretextos .
Se multiplican las corrosiones.
Los brillos artificiales en la cara
ya no deslumbran a nadie ;
el mareo de testigo.
Redescubierta la paz se escapa.
Desaparece atrás de un edificio espantoso
y lleno de ventanas.
La paz ,
cuando vuelva ¿estaré ?
Suerte y buena suerte a los decapitados .